| Manu | Fecha: Jueves, 23-01-2014, 11:21 AM | Mensaje # 1 |
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|  Vista del muelle interior casi terminado
El muelle interior está prácticamente terminado a falta de algunos detalles por cerrar. Sin embargo, ya presenta algunas zonas agrietadas, sobre todo en las juntas de unión de las piezas que lo conforman que, a modo de ver de algunos marineros, son de un tamaño excesivo para una obra nueva como esta. Un temor fundado en lo sucedido con el primer intento del proyecto, que se paralizó por el hundimiento parcial de la estructura a causa de los fangos. No obstante, el promotor –Portos de Galicia– indicaba ayer la inexistencia de problema estructural alguno y, de hecho, espera que la adjudicataria le pueda entregar la obra hacia finales de este mes.
El nuevo muelle dispondrá de 120 metros lineales de atraque que se destinarán, sobre todo, para dar servicio a los barcos del cerco. La obra comenzó hacia finales del año pasado, pero no fue necesario empezar desde cero pues se ha dado continuidad a una parte de la estructura construida en 2004 y que se había asentado, según indicaban las autoridades en una visita realizada a la zona en agosto del año pasado. El problema estaba en el tramo más extremo porque se estaba construyendo encima de una bolsa de fangos –no detectada en los estudios geotécnicos– y se hundía.
Obligaciones técnicas
Portos de Galicia estudió de nuevo la situación, redactó otro proyecto y un pliego de condiciones muy concreto sobre las actuaciones y materiales a utilizar por la empresa para garantizar la viabilidad de este segundo intento. Así contemplaba dragados de más de 3.000 metros cúbicos de sedimentos, enrasados con grava, etc. O el empleo de determinadas técnicas de ingeniería para conseguir un perfecto asentamiento, hasta el punto de que no se admitían ofertas que incluyesen propuestas de modificaciones técnicas.
Sin embargo, la desconfianza aún sobrevuela al sector y algunos marineros han expresado su inquietud porque las juntas presentan una dilatación que les parece excesiva, teniendo en cuenta que la obra solo tiene unos meses de vida. Es más, apuntan a la existencia de alguna grieta impropia de la unión de las piezas que conforman el muelle.
No obstante, desde el ente público enviaban un mensaje tranquilizador indicando que los ingenieros no tienen constancia de problema estructural alguno; y señalando que, en todo caso, la supuesta dilatación de algunas uniones podría responder al asentamiento de la estructura, pero no supondría ningún peligro. De hecho, está previsto que la adjudicataria le entregue la obra próximamente y conforme al proyecto.
Las mismas fuentes indicaron que esto podría suceder la semana próxima, siempre que las condiciones meteorológicas permiten zanjar algunos de los flecos pendientes. Esto es limar los salientes de algunos módulos. Un trabajo para el que los operarios tienen que introducirse en el mar sin peligro y el mal tiempo de los últimos días lo ha impedido, retrasando la finalización.
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