Manu | Fecha: Lunes, 15-04-2013, 10:38 AM | Mensaje # 1 |
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| Un hobre consigue sacar del mar a una joven a la que se llevó una ola mientras pescaba en O Portiño, en el litoral coruñés
Constante Rivas señala el lugar donde estaba la joven.
Estaban a punto de dar las siete de la tarde cuando Constante Rivas, Tito, se disponía a abandonar A Lagarteira, un enclave de O Portiño coruñés, tras pasar un día en familia en una pequeña vivienda que tiene en la zona. Era el primer día que el cielo daba una tregua y se podía disfrutar de la costa. Pero entonces empezó a oír gritos. Asomó la cabeza y los niños le contaron que una chica acababa de caer al agua.
No se lo pensó dos veces. Agarró las aletas de bucear y se tiró al agua. Tuvo que nadar más de cuarenta metros hasta llegar al punto donde se encontraba la joven, que ya estaba inconsciente y boca abajo, por lo que sus esfuerzos se centraron únicamente en reanimarla, antes ni siquiera de pensar en cómo salir del agua. Cuando lo consiguió, pidió ayuda a las personas que quedaron en tierra: «¡O me la cogéis o nos vamos los dos!», les gritó.
Dicho y hecho. Entre dos hombres agarraron una cuerda y con ella consiguieron devolverlos a la orilla, adonde acababan de llegar varias patrullas de la Policía Local y el novio de la joven, que relató lo sucedido. La pareja -21 años ella, 22 él- había decidido pasar la tarde pescando en esta zona del litoral coruñés. Pero el día, que amaneció primaveral, se fue complicando según avanzaba la tarde con un mar embravecido que, de repente, lanzó sobre ellos una ola de dos metros que, literalmente, los engulló. El joven relató que cada uno fue despedido hacia una zona diferente, por lo que nada pudo hacer por su novia. Hasta que llegó Tito. Este, sin embargo, no quería darle más importancia al gesto. «¿La chica está viva? Pues eso es lo que importa. La medalla se lleva en el corazón». Pero lo sucedido tiene un doble valor para él. No era la primera vez que se encontraba con un suceso similar. Hace unos años, ya había intentado recuperar del mar a otra persona, aunque en ese caso sin final feliz. Y mucho antes, su padre también se había convertido en un héroe local al protagonizar un rescate similar en el mismo lugar.
Pese a que la chica (A. H. G.) estaba consciente cuando salió del agua, tanto ella como su novio, que salió del percance con varias magulladuras, fueran trasladados al Hospital A Coruña por ambulancias del 061, que participó en el dispositivo de emergencia junto a la Policía Local. A ella se le diagnosticó hipotermia. A él, policontusiones y un traumatismo en el tobillo.
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